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Situado en Lloseta, en la Sierra de Tramuntana, esta moderna finca con piscina privada y jardín ofrece un segundo hogar a 6 huéspedes. La piscina privada de sal se encuentra envuelta en un jardín bien cuidado y tiene vistas a las montañas de Lloseta. Varias tumbonas y sombrillas al lado de la piscina son ideales para descansar y - lo más importante - ¡conseguir un bronceado perfecto! La piscina de 8 x 4 metros tiene una profundidad entre 1 y 1.7 metros. El jardín no solo tiene un área de césped grande para extender la toalla, sino también algunos árboles que dan sombra durante los días más calurosas del día. El sábado se puede comprar verduras y alimentos frescos en el mercadillo de Lloseta y al llegar a casa, preparar grandes platos en la barbacoa móvil. El porche ofrece el ambiente perfecto para una cena al fresco. La parcela está vallada y hay vecinos alrededor de 50 metros. Las estancias se reparten en una sola planta y presentan un diseño claro y moderno, con colores frescos y muebles de buena calidad. El salón-comedor con aire acondicionado está abierta a la cocina y es, gracias a la ventana grande, un cuarto luminoso. El cómodo sofá invita a ver una película en la televisión de satélite o hacer una siesta agradable antes de salir a cenar. La cocina tiene mucha superficie para trabajar y preparar grandes platos. Para ello disponen de una vitro cerámica, un horno, una batidora y utensilios de cocina, entre otros. La lavadora, plancha y tabla para planchar se encuentran en la cocina. Los dormitorios están diseñados con una simplicidad agradable, con colores suaves y aire acondicionado y armario cada uno. Dos dormitorios vienen con una cama doble y uno de ellos tiene suficiente espacio para preparar una cuna/trona. El tercer dormitorio es ideal para dos niños ya que tiene una cama nido. Ambos baños de la casa están equipados con ducha.

Lloseta halla en el centro-oeste de Mallorca y es la puerta a la Sierra de Tramuntana. Cerca se encuentran muchas rutas maravillosas, entre ellas el sendero al Castillo de Alaró, Caimari a Lluc o al embalse de Cúber. En el pueblo encuentran una tienda de comestibles, un banco y buenos restaurantes, entre ellos el famoso "Santi Taura". La ciudad de Inca, a 5 minutos conduciendo, ofrece supermercados, más restaurantes, tiendas y bares. El norte de la isla sorprende con playas de ensueño, entre ellas Can Picafort, Playa de Muro o Puerto de Pollença. Un coche es necesario.