Hola, soy Leandro, el anfitrión de esta finca, y será un placer recibirte. Me encanta conocer personas de diferentes lugares, compartir experiencias y hacer que cada huésped se sienta realmente a gusto. Creo que los viajes se disfrutan mucho más cuando te reciben con buena energía y atención a los detalles, por eso me esfuerzo en ofrecer un espacio limpio, cómodo y lleno de calma, donde puedas descansar y desconectarte sin preocupaciones. Siempre estoy disponible para lo que necesites: recomendaciones, apoyo durante tu estadía o cualquier detalle que haga tu experiencia más cómoda. Me gusta que cada persona que llega se sienta bienvenida, como si viniera a visitar a un amigo. Estaré encantado de ser parte de tu viaje y ayudarte a que tu paso por este lugar sea una experiencia que quieras repetir.

Bienvenido a un lugar donde la tranquilidad del campo se une con una vista espectacular de la ciudad. Esta finca es mucho más que un alojamiento: es un espacio pensado para que desconectes del ruido, respires aire puro y vivas momentos únicos en contacto con la naturaleza. Desde que llegas, sentirás la calma del entorno, el sonido de los pájaros, el frescor de los árboles y una energía especial que invita al descanso. Aquí podrás disfrutar de amplios espacios, zonas verdes, privacidad total y una comodidad pensada para hacerte sentir como en casa. Ya sea que vengas en pareja, en familia o con amigos, la finca ofrece el ambiente perfecto para relajarte, compartir y crear recuerdos inolvidables. Al caer la tarde, el paisaje se transforma y te regala una vista panorámica de la ciudad iluminada, ideal para terminar el día con una copa en la mano o simplemente en silencio, disfrutando del momento. Además, la finca está ubicada estratégicamente: lo suficientemente lejos para sentirte desconectado, pero lo bastante cerca de la ciudad como para acceder fácilmente a tiendas, restaurantes, y sitios de interés. Es el equilibrio perfecto entre naturaleza y comodidad.

La finca está ubicada en una zona rural muy tranquila, segura y rodeada de naturaleza. Lo más especial es su cercanía a la ciudad, lo que te permite disfrutar del silencio del campo sin renunciar a la comodidad de tener todo a pocos minutos. Desde lo alto, tendrás una vista panorámica increíble tanto de día como de noche, perfecta para relajarte o tomar fotos inolvidables. Es una zona ideal para descansar, caminar al aire libre, respirar aire puro y desconectarte de todo… sin estar lejos de nada.