Pensiones en Mompiche

muy buenos anfitriones el personal del hotel muy atentos y amables se portaron muy bien desde el momento en que llegamos hasta el momento de salir.

Muy lindo hostal, decorado con muy buena onda, con varios lugares para el esparcimiento: balcón de la habitación con hamacas, el bar y mesas afuera bajo techo. Se disfruta mucho tirarse a leer en una de las hamacas, al anochecer, escuchando el ruido de las olas. Está ubicado frente mar, aunque esa playa puede ser un poco peligrosa por las rocas. Pero se camina dos cuadras y se llega a la playa más linda y tranquila. Está a una cuadra del centro. La habitación que me dieron tenía una cocina con mesa, frigobar, cuatro camas, mosquitero, ventilador, un baño pequeño y el balcón. Las paredes y techos recubiertos de cañas y madera le dan un aspecto rústico muy lindo. La atención fue excelente, tanto de Santiago como de las chicas del bar/desayuno, Ana y Vanessa. Fue un placer desayunar y tomarse unos jugos por la noche, junto a otros huéspedes del hostal, atendido por ellas. El desayuno sencillo, pero estuvo bien. Huevos revueltos, café, jugo y unas arepas (porque había pedido desayuno sin gluten, de lo contrario son tostadas). También tienen servicio de lavandería a muy buen precio.

Lo que me me gustó más fue la ubicación del cuarto, en un piso alto que nos dio más tranquilidad, además el cuarto era muy lindo y ordenado y con espacio suficiente para los dos. Tener una amaca afuera encima fue lo ideal para momentos de relax!