
De
ColombiaNuestra experiencia en el hotel fue mixta. El hotel en sí es un poco antiguo, pero tiene una buena ubicación en la parte más antigua de la ciudad. La habitación era bastante grande y con una vista excelente, lo cual fue un gran punto a favor. Además, el desayuno fue muy completo y variado, y el personal encargado de atendernos en el desayuno fue siempre muy amable.
Sin embargo, el servicio en recepción dejó mucho que desear. El trato por parte del personal fue bastante negativo. La actitud fue fría y desinteresada, y en muchas ocasiones sentíamos que teníamos que sacarles las palabras de la boca. A veces nos miraban como si ya debiéramos saber todo sobre la ciudad. No ofrecieron ayuda con los tours, y fue sorprendente descubrir que ni siquiera conocían los detalles básicos, como los números de contacto de las empresas de tours.
La única excepción fue Ebba, quien fue la única persona en recepción que nos trató de manera amable y profesional. Ella fue la que nos ayudó a buscar un bus, y nos brindó el apoyo necesario. Lamentablemente, el resto del personal, en general, parecía molesto o desinteresado en ayudarnos, incluso para tareas tan sencillas como pedir un taxi.
En resumen, el hotel tiene buenas instalaciones, una excelente ubicación y un desayuno de calidad, pero la actitud del personal de recepción fue un inconveniente importante en nuestra estancia.